Extremadamente popular sobre todo en la década de los 90 del siglo pasado, la forma de dibujar de Simon Bisley es una mezcla irreverente y extremadamente única que recuerda los mejores trazos de Frank Frazetta mezclados con los colores de Gustav Klimt, el surrealismo de Salvador Dalí o las pinceladas salvajes de William Turner mezcladas con el hiperrrealismo de Richard Corben dibujando mundos fantásticos y personajes imposibles. Incluso si de verdad no le conoces, cosa que dudo si estás leyendo esta sección, habrás visto sus coloridas y vistosas ilustraciones en infinidad de ocasiones. Dibujante y portadista durante una larga época en la que llevó a un nivel superior a personajes como Lobo, el bárbaro Sláine o el mismísimo Juez Dredd, aprovechó esa época dorada de los 90 para difundir su obra en carteles de cine, portadas de bandas de música e incluso proyectos tan personales como su visión de La Biblia o el Paraíso Perdido. Activo hasta la saciedad como artista, nunca es tarde para descubrirle ahora en una de sus más brillantes, alocadas e hilarantes aportaciones al mundo del cómic con este tomo recopilatorio Lobo. Retrato de un bastardo, que recopila las aventuras del czarniano con guiones de verdadero lujo gracias a las ideas y palabras de nombres destacados y gigantes como los de Neil Gaiman, Keith Giffen, Alan Grant, Amanda Conner y Jimmy Palmiotti. Se inugura con este tomo además una nueva línea de Grandes Novelas Gráficas DC en las que, tanto la DC original como ECC Ediciones en nuestro país pretenden publicar y recuperar algunas de las obras más destacadas del Universo DC en un formato renovado, con tapas duras y material rescatado digno de todo ávido coleccionista de lo mejor de los mejores. Lo mejor para quienes no son amigos del compromiso de las grandes colecciones, es que estos tomos pretenden incluir siempre historias autoconclusivas que se puedan disfrutar de principio a fin sin miedo al «continuará».
Lobo. Retrato de un bastardo se inicia con las cuatro partes en que originalmente se publicó «El último czarniano», donde El Hombre como le gusta hacerse llamar, recibe el encargo de rescatar a una presa para llevarla al planeta Cairn. Lo que ignora es que la mujer en cuestión no solo es czarniana sino que también se trata de una antigua maestra suya que está escribiendo una biografía sobre él. Comienza así un despliegue de salvajadas sin freno del que es sin duda el cazarrecompensas más temible del Universo DC. Al guión, el británico Alan Grant sin filtros y la imaginación desbordada. Le sigue otro relato en cuatro partes como es «El regreso», de nuevo con Alan Grant exultante en su exageración de un personaje de por sí siempre exagerado y sin límites. Le sigue «La sanción navideña de Lobo», con guión nuevamente de Alan Grant y que avisa desde su portada que «contiene mal gusto en forma de ultra-violencia, palizas a íconos y ‘El Dedo’. Más ofensivo de de por si lo son las Navidades normalmente». Un gran despliegue visual cierran el tomo con el «Batman/Lobo número 1», «Beligerante y con el culo al aire», donde Lobo comparte protagonismo nada menos que con la siempre deslumbrante ¡Harley Quinn! y, por último una mini historia de Batman de impresionantes planchas titulado «Un mundo en blanco y negro». El broche final son varias páginas con las portadas originales de algunas de las historias contenidas en el tomo. En resumen: nada sobra y todo es disfrutable en este completísimo tomo, ideal para introducirte al mundo del personaje de Lobo pero sobre todo al estilo de dibujo de un maestro a reivindicar como lo sigue siendo Simon Bisley.
SOBRE LOS AUTORES
SIMON BISLEY
Simon Bisley es un dibujante de cómics británico mejor conocido por su trabajo de los años 90 en ABC Warriors, Lobo y Sláine. Simon Bisley empezó a dibujar cuando tenía seis años. Es autodidacta, con sólo una corta estancia de un año en una escuela de arte. Bisley comenzó su carrera haciendo portadas de revistas y álbumes, siendo su primer trabajo un diseño de camiseta para la revista de heavy metal Kerrang. Finalmente, aunque no tenía experiencia en el dibujo de historietas en ese momento, fue contratado por la revista 2000 AD después de ver sus interpretaciones de los personajes de la revista. Según Comic Book Database, «cuando aún era estudiante, Bisley pintó un robot sosteniendo a un bebé que envió a las oficinas del año 2000 AD La imagen fue vista por Pat Mills y lo inspiró a relanzar la tira ABC Warriors con Bisley como artista, en 1987″. Comenzó a trabajar en ABC Warriors en 1987 y luego pasó a Sláine y Juez Dredd. Desde 1997, Bisley es colaborador habitual de la revista de cómics Heavy Metal. Bisley ha realizado trabajos de diseño para varios vídeos musicales, incluido «Room Service» de Chippendales. El estilo de Bisley está fuertemente inspirado en grandes artistas así como en las portadas de álbumes de rock y los graffitis, así como en los cómics tradicionales. El trabajo de Bisley influyó en la Bestia en el episodio de Doctor Who de 2006 «The Satan Pit», y en el artista gráfico de personajes de Simon Pegg, Tim Bisley, en la comedia de Channel 4 Spaced.
ALAN GRANT
Grant fue aficionado al cómic desde chaval, sobre todo a los cómics de superhéroes que familiares le hacían llegar desde Estados Unidos. Fue un dibujante frustrado que acabó demostrándose dotado para escritir, tanto guiones como artículos. De hecho, su primer trabajo fue como redactor en la editorial escocesa D. C. Thomson en 1967. Su jefe por entonces era el guionista y editor John Wagner, quien le dio su primera oportunidad como guionista, en la serie Starlord británica. A partir de ese momento, comenzó a elaborar guiones cortos para títulos como Tornado, Future Shock y Blackwak, entre otros títulos, hasta llegar a Judge Dredd, que coescribió junto con Wagner.
Grant trabajó en la sombra durante estos primeros años, escribiendo historietas de Robo-Hunter y Strontium Dog bajo seudónimo (TB Grover) o retocando diálogos de guiones de otros autores, como Gerry Finley-Day. También escribió historias para Eagle, que no llamaron mucho la atención, y otras para Judge Dredd, como el arco The Apocalypse War, que resultaron atractivas para los editores estadounidenses, porque tras haber comprobado la popularidad de sus historias fue reclamado para trabajar en DC, en la serie Outcasts. De ahí pasó a encargarse de Batman en Detective Comics a partir de febrero de 1988, con Norm Breyfogle como dibujante. Grant sería uno de los principales guionistas de Batman hasta finales de los años noventa. Grant también trabajó para otros editores estadounidenses. Por ejemplo, creó la serie The Last American para Epic Comics, en la que se evidenciaba el viraje ideológico del autor hacia el anarquismo. Ese espíritu perfundió en los guiones que escribió en los años noventa en cómics como Detective Comics, Strontium Dog, The Bogie Man y, sobre todo, en Lobo, el personaje creado por Keith Giffen, que bajo la batuta de Alan Grant gozó de gran éxito. El resto de los años noventa Grant tuvo la agenda llena de encargos: LEGION, The Demon, Batman: Shadow of the Bat, Batman: Contagion, Batman: Legacy, Batman: Cataclysm y otros trabajos.
Al final del siglo XX, tras el fracaso con algún proyecto, como su creación Anarky, Grant invirtió más esfuerzos en el ámbito de la animación, encargándose de hacer guiones para series como Action Man. Inició proyectos propios, como la aventura de Bad Press Ltd, sello bajo el cual lanzó Shit the Dog; los proyectos independientes FutureQuake o Northern Lightz; la organización de festivales, como el Moniaive Comics; la escritura de novelas protagonizadas por superhéroes, como The Stone King (de 2001) o Last Sons (de 2006) con Superman; la adaptación de literatura al cómic (adaptó Kidnapped, de Robert Louis Stevenson, para que lo dibujase Cam Kennedy dentro de un proyecto vinculado con la UNESCO) y otras actividades. En la segunda década del siglo XXI aún seguía trabajando en proyectos apartados de la corriente general (como los sellos Berserker Comics o Renegade Arts Entertainment, de los cuales formó parte) y mantuvo vivo su sello Bad Press, trabajando en guiones hasta el final de la segunda década del siglo XXI, como Scott vs Zombies o Rok of the Reds, por citar dos ejemplos. Grant fue merecedor del premio Inkpot en 1992.