En la misma semana en la que se ha hecho público el fallo del Premio Nacional de Cómic para El Cuerpo de Cristo de Bea Lema por ser, según el jurado, “una obra innovadora, arriesgada en lo formal, con texturas y composiciones que trascienden las técnicas más utilizadas sin renunciar al uso del humor y a una mirada poética”, creemos que no es mala idea dedicar todo lo que queda de semana a recomendaros desde aquí obras sólo de autoras de cómic. Porque aunque incluso las creadoras nos han recordado todo lo que queda por ganar, es innegable la cada vez más amplia presencia y abanico de posibilidades gráficas y temáticas que las mujeres siguen introduciendo en este Noveno Arte del que nunca nos cansamos de hablaros. De hecho, lejos de polémicas y en algo que de por sí es Arte, el gusto personal es algo tan subjetivo como respetable. Aunque en el caso del cómic de hoy, Crave, de la más que veterana Maria Llovet, una de nuestras autoras más solicitadas y queridas a nivel internacional, me sigue llamando la atención lo disimuladas que pasan sus obras a este lado del Atlántico cuando su obra causa verdadero furor en Estados Unidos, donde ha colaborado con nombres propios de la talla de Brian Azzarello o James Tynion IV.
En sus muchas entrevistas, entre las cuales os recomendamos escuchéis integra la que Normaland le dedicó a Maria Llovet con motivo de la necesaria celebración que supone la publicación de Crave por Norma Editorial, la autora rehuye definirse por un único estilo o influencia, aunque observando su potente trazo resulta inevitable pensar en algunas de las mejores tintas de autores europeos mezcladas con la siempre reconocida influencia que en ella supuso su descubrimiento del manga. Lo que es innegable, miremos la obra que miremos de todas las minuciosamente editadas por Norma Editorial en España, es que Maria Llovet es una dibujante única, capaz de dejarnos horas delante de sus brillantes portadas pero también enredados inevitablemente de principio a fin en sus viñetas e historias.
Crave es un original thriller sobre adolescentes que mezcla lo mejor de cualquier posible historia contada en un instituto con un toque de ciencia ficción que, por momentos, me hizo pensar tanto en esa joya que es The Faculty de Robert Rodríguez mezclada con 2001 Una odisea en el espacio. Maria Llovet sólo ha tenido que mirar un poco alrededor para encontrar en la realidad la base e inspiración perfecta de Crave: en un mundo donde absolutamente todo ser teóricamente definible como ser humano hace que su vida gire en torno a la pequeña pantalla de sus móviles, la autora imagina la aparición de una misteriosa app que promete nada menos que “ayudarte a conseguir todos tus deseos”. Lo mejor es que la app, denominada Crave, aparece y se esparce como el peor de los virus, entre las paredes de una universidad repleta de estudiantes que rigen sus vidas a partes iguales entre sus móviles y sus hormonas. No es de extrañar pues que, el 99% de los deseos de los usuarios de Crave se desvíe a los deseos más primarios que tan bien ha dibujado siempre Maria Llovet.
Desplegando una interesante galería de personajes principales y secundarios, donde protagonismo y sensualidad están más que equitativamente repartidos entre los dos sexos, Maria Llovet cede completamente a su insinuante ejercicio erótico gráfico en el que es verdaderamente experta. Retratar el deseo es una constante de su obra en la que incide, tanto su búsqueda de dibujar con maestría cuerpos en movimiento como de recordarnos la naturalidad con la que deberíamos ser capaces de recordar la realidad de lo que es tan natural como el sexo. Y si bien Crave tiene páginas donde las temperatura corporal es bastante superior a la media y éste es un cómic que sólo recomendaría a adultos, Maria Llovet recuerda incansablemente que, pese incluso a la afición de sus personajes por el BDSM, en el fondo le resulta inevitable añadir un lado romántico a sus historias que, en realidad, nos coloca aún más cerca de creernos las historias que llenan y concluyen entre estas páginas.
Por supuesto Crave avanza por encima del exhibicionismo gráfico de Maria LLovet retratando los momentos más tórridos en los que casi todos los estudiantes se acercan a cumplir sus deseos porque, como resulta obvio, es del todo imposible contentar a un adolescente y, cuando los deseos de éstos empiezan a retorcerse o a no cumplirse frente al libre albedrío de la gente, todo se complica y convierte en un escenario casi apocalíptico en el que David, Alexandra y sus amigas y amigos tendrán que enfrentarse a los riesgos de esa app con apariencia de Inteligencia Artificial descontrolada e insana. No puedo imaginar la angustia de los aficionados norteamericanos que tuvieron que esperar mes a mes a completar una historia del todo redonda, especialmente entretenida y excepcionalmente dibujada. A este respecto, como recordaba el editor de Norma encargado de los títulos norteamericanos en la entrevista de Normaland, Norma Editorial ha editado toda la obra de Maria Llovet desde que sus cómics eran únicamente en blanco y negro. Y ahora, más confiada que nunca en su capacidad y experiencia, la autora se ha lanzado a colorear con plena autoridad sus ilustraciones, logrando, como puedes comprobar en todos los ejemplos que hemos querido mostrarte, un resultado que ejerce aún más atracción si cabe por su dominio gráfico.
Crave es un paso importante en la imparable carrera de Maria Llovet. Editada en Estados Unidos en formato de grapa, Norma Editorial ha publicado aquí esta obra en una impecable versión integral en tapa dura que incluye los 6 números de que consta la serie. Por supuesto, su generosa sección final de extras cuenta con todas las portadas norteamericanas, alguna ilustración adicional y numerosos bocetos y estudios de personajes que no tienen desperdicio alguno. Una autora a descubrir si aún no la conocías, a reivindicar y que tú también recomendarás seguro a poco que te dejes caer en cualquiera de sus obras.
SOBRE LA AUTORA
MARIA LLOVET
Maria Llovet es una ilustradora y autora de cómics de Barcelona. Ha publicado varias obras como autora completa tanto en Europa como en Estados Unidos, entre ellas Luna, Loud, Heartbeat, Eros/Psique o Porcelain. También ha colaborado como dibujante con guionistas como Brian Azzarello con Faithless o James Tynion IV con Sandman Universe: Nightmare Country y Thessaly.