Rodaje e inspiración del videoclip. MUSEO WÜRTH LA RIOJA
Se dice de la inspiración que es un estímulo o lucidez, reacción que siente una persona y que favorece la creatividad, la búsqueda de soluciones, la concepción de ideas que permiten emprender un proyecto, y muy especialmente la que siente el artista y que impulsa la creación de obras de arte.
Partiendo de la perspectiva y la emoción que experimenta el creador cuando se sumerge en la obra de otro, nace algo nuevo, algo que trasciende más allá de la idea inicial. Este es el caso de » Frágil » una pieza que se nutre de distintas disciplinas y ha podido ser forjada desde la colaboración de un equipo humano en total sintonía.
«Frágil» ha conseguido aunar el talento de distintos autores, el músico y letrista Diego M. Continente y su banda Messura, el escultor Félix Reyes, el bailarín y coreógrafo Samuel Retortillo, la bailarina Luciana Croatto y el realizador audiovisual Álvaro Sáinz. Y ha sido rodado en el Museo de Arte Contemporáneo Würth La Rioja entre la obra escultórica «Laberinto» de Félix Reyes, perteneciente a la colección del museo.
El aporte de todos ellos y su personal mirada a la hora de combinar cada una de sus disciplinas ha quedado plasmado en «Frágil», el videoclip con el que Messura presenta su nuevo tema.
CANCIÓN
Influenciados por la parte más orgánica y pausada de Radiohead y el epicismo emo-hardcore de mediados/finales de los 90. Desde que los productores Manu Cabezalí y Victor Cabezuelo escucharon el tema antes del proceso de pre-producción, se apostó por la honestidad como base del sonido y la forma del tema. Es en el estudio El Lado Izquierdo, con Dany Richter a los mandos, donde se termina la producción del tema que da nombre al disco. Tan solo hay dos elementos extras en la canción, un loop de percusión distorsionada y un colchón de sintes ambiental, y no se dobló ninguno de los instrumentos. Ni la voz de Diego está doblada, ni tan siquiera coros.
TEMÁTICA
Frágil habla del punto de inflexión que sufrimos hace dos años. Está inspirada en el baño de realidad que nos dio la aparición del virus. Vimos como nuestras «…estructuras temblaron. Nuestro reino cayó…«. Bajo esas mil capas de superioridad del ser omnipresente, que se desvanece, existen muchas fragilidades. Nuestros actos de soberbia con los demás y nuestro sentido de la propiedad con nuestro entorno sucedidos a lo largo de la historia, no quedan impunes. Se suceden en continuo crescendo, y como la canción, al final estallará para volver a la calma.
¿Quién sabe? Tal vez
«…llega tarde ya… llega tarde…»
