Nueva edición de «Historias color tierra», una de las obras más importantes del coreano Kim Dong-Hwa. Planeta Cómic.

El fenómeno de masivas novedades editoriales ni es un tema nuevo en este rincón virtual ni parece querer amainar. Es más, si nos centramos en géneros y estilos, uno de los mayores fenómenos en los últimos años, a nivel global, es el imparable crecimiento del fenómeno manga japonés. Desbancando de las cifras de ventas a los superhéroes en Estados Unidos y a muchos hasta ahora intocables títulos europeos incluso en Francia, en nuestro país este vuelco a los trazos de ojos rasgados hizo florecer incluso divisiones completas dedicadas el género en grandes grupos editoriales o al nacimiento de nuevas editoriales convencidas de la resistencia del género. En la continua lucha por tener un hueco en las estanterías de novedades de cualquier librería o tienda de cómics, la necesidad y fiebre por conseguir nuevos títulos ha desviado la atención a algo que, en esta vorágine imparable, al menos podemos agradecer: desde hace algún tiempo la avidez occidental buscando ventas ha encontrado en otros países asiáticos un filón que, como lectores, nos permite disfrutar del trabajo de artistas de nuevos rincones de los que hasta hace poco sólo se compartían minoritariamente. El libro de hoy es un ejemplo: Historias color tierra, estandarte del manhwa o cómic originario de Corea, ya fue editado entre 2008 y 2009 en tres volúmenes en tapa dura por Planeta cuando conocíamos a la editorial como Planeta DeAgostini.

Por suerte para los muchos seguidores y seguidoras de un autor como el coreano Kim Dong-Hwa, que lleva décadas siendo respetado por su profunda sensibilidad y resultados como autor, Historias color tierra vuelve a ver la luz en una nueva y flamante edición, en este caso en tapa blanda pero retomando con calidad y sumo cuidado de nuevo el formato de los tres tomos. Con esta obra el autor alcanzó una madurez en su forma de contar historias que le convirtió en el carismático autor que sigue siendo a día de hoy. El autor recuerda, en una entrevista promocional cuando su obra fue publicada por primera vez en Francia por Casterman que, tras llevar tiempo escribiendo historias para un público más jóven, hubo «reacciones de sorpresa al principio y luego muchos comentarios positivos. En ese momento, cuando se publicó por primera vez, tenía un estilo y un tema realmente nuevos. Nadie había trabajado de esta manera antes, con un enfoque, digamos, literario. Se consideraba que los cómics debían tener una función de entretenimiento, y nada más. A priori no se trataba de poder abordar temas “serios” de esta manera. Tuve una excelente acogida por parte de la crítica y el público me siguió: un público adulto, a partir de los veinte años, que contrastaba claramente con el público adolescente de mis publicaciones anteriores. Algunos lectores me escribieron para decirme que iban a hacer que su propia madre leyera mi historia, y puedo decirles que en Corea en ese momento, ¡eso era prácticamente impensable!»

Historias color tierra es la historia al detalle de Ihwa, una niña inocente y completamente ingenua de siete años que vive con su madre en un pequeño pueblo de la Corea más profunda y rural. Habiendo muerto su padre, Ihwa y su madre se enfrentan solas a un mundo en el que los hombres son el puro retrato del ambiente en que se han criado: la mayoría rudos y soeces. Especialmente unidas y cómplices, madre e hija comparten una vida que transcurre en la modesta taberna que regenta una mujer que no renuncia a su sensibilidad femenina pese a estar curtida frente a las habladurías de sus malintencionados vecinos, encadenada a una vida dura ante la que no hay sitio para la debilidad. Historias color tierra es un cuidadoso retablo costumbrista que relata, con venerable respeto, lo que el autor define en un poema introductorio con tanta sensibilidad y acierto como sus personajes, en especial los femeninos: «A medida que levanto, una a una, las profundas arrugas que, como hebras de una telaraña, cubren el rostro de mi madre, va apareciendo con claridad (…) las pequeñas historias de mi madre de 16 años… Las historias color tierra…»

«Ihwa y su madre forman un dúo de madre e hija absolutamente típico de la forma en que son las mujeres en Corea -añade Kim Dong-Hwa. En una familia coreana, aún hoy, lo que una madre no puede confiar a un marido algo rígido o conservador, se lo cuenta felizmente a su hija —la mayor, cuando son varias—, con gran complicidad. Y esto incluso cuando la muchacha en cuestión se casó y abandonó el hogar familiar. Porque, por supuesto, funciona en ambos sentidos: la hija, por su parte, también, con la misma voluntad, le contará a su madre lo que siente en la intimidad de su propia vida».

A lo largo de un medido transcurso del tiempo, Historias color tierra avanza no sólo en las vidas de madre e hija, sino en todos los descubrimientos de Ihwa: desde sus obvias diferencias anatómicas con los niños de la aldea y casas cercanas, que se burlan de ella hasta que ella empieza a interesarles; pasando por la transformación de su cuerpo, el roce de las primeras mariposas en el estómago y los primeros desengaños provocados por el amor… y por supuesto la presencia del sexo. Kim Dong-Hwa avanza desde sus personajes con la naturalidad y realismo de quien observa y nos cuenta lo que ha visto: «siempre me ha apasionado comprender las identidades de las mujeres. Como autor de cómics, antes de hacer Historias color tierra, escribí historias destinadas al público femenino. Entonces, creo que mi inspiración vino principalmente de observar a las mujeres de mi entorno. Me parece probable, por ejemplo, que las emociones que experimenta el personaje de Namwon, la madre de Ihwa, me lleguen en parte de mi propia madre».

Y sin embargo, Kim Dong-Hwa deja claro a la vez que «no es realmente la dimensión femenina per se la que está en el origen de la historia, incluso si es importante, obviamente -afirma el autor, rotundo-. Lo que principalmente me guió al diseñar Historias color tierra fue mi deseo de contar la historia del aprendizaje, de la transformación. Durante mucho tiempo quise contar, en todos sus detalles, cómo crece un ser humano, cómo se transforma desde la niñez hasta la edad adulta. A partir de ahí, me pareció lógico resaltar un personaje femenino: las mujeres son, con diferencia, las que más transformaciones sufren durante el periodo previo a la edad adulta. Y siempre hay más que decir cuando nos interesa el futuro de las mujeres más que el de los hombres…«

Testigos de las diferentes edades de Ihwa y sin importar que seas lector o lectora, Historias color tierra tiene el reposado sabor de una historia bien contada, en la que dejarse llevar y perderse como lo hacemos en esas tardes de verano en las que quizás lo más notable de lo vivido es la ausencia de preocupaciones, sin necesidad de vivir nada que no sea el silencio que tenemos delante y poder disfrutarlo sin prisas. Pero no te equivoques, este libro ni es lento ni deja de añadir personajes, momentos y vivencias que todos hemos experimentado o presenciado en algún momento de nuestro camino y que aquí devoras página a página sin poder dejar el libro hasta el final. Kim Dong-Hwa sólo nos recuerda, a través del relato de dos mujeres tan fuertes como despiertas a sentirlo todo, la importancia de los detalles: «Lo que está en el centro de la historia es la relación entre los dos personajes, la forma en que evolucionan sus sentimientos mutuos y sus emociones. Quería asegurarme de que madre e hija encarnaran cada una a su manera, en diferentes edades, dos facetas distintas y complementarias de la identidad femenina».

Historias color tierra es un libro atemporal, tanto en lo que cuenta Kim Dong-Hwa como en lo que viven sus personajes. Para quienes tuvimos la suerte de vivir antes de que la tecnología lo invadiera todo, este libro es ese cálido recuerdo que se repite sin importar el tiempo, momento o país en que tuvimos la suerte de vivir momentos como los retratados aquí. En el caso de este curtido autor y delicado dibujante de trazos sencillos pero siempre detallista, Kim Dong-Hwa es especialmente claro: «me gusta mucho esta Corea de antes donde no existían los coches ni las torres urbanas. Extraño esta época pasada, siento un poco de nostalgia por ella. Y no les sorprenderé, evidentemente, diciéndoles que, en verdad, la época en la que se desarrolla Historias color tierra es más o menos la de mi primera infancia. Siempre somos más certeros, como narradores, cuando nos referimos a elementos que nosotros mismos hemos conocido«.

SOBRE EL AUTOR

KIM DONG-HWA

Kim Dong-Hwa nació el 10 de noviembre de 1950 en Seúl. Comenzó su carrera en la ilustración de animales, especialmente para niños, en 1975. En ese año debutó con Mi cielo. La calidad de su línea rápidamente le abrió las puertas de varias editoriales, donde pudo publicar más historias para adultos. entre ellas La Bicicleta Roja, que le valió el éxito entre el público en general. Se le considera el creador de un género de cómics “para adultos”, llamado así por la temática que allí se desarrolla. A pesar de estar profundamente arraigada en la cultura coreana, sus obras logran un mensaje universal a través de su humanismo y sensibilidad. Está considerado uno de los grandes representantes del manhwa (cómic) coreano.

«Hitler ha muerto» de...

Lleva pasando desde que la humanidad camina por la...

«Samuel & Beckett»: el...

Hay una gran parte del mundo del cómic que...

“Mañana Será Otro Día”...

Hay autoras cuyo arte es su vida en el...

«Los Viajes de Gulliver....

Viajar ha sido siempre la llave de los descubrimientos....

Cumbre del terror gráfico:...

Como pasa con nuestros mejores amigos, hay autores cuya...

«El abismo» de Adam...

De entre nuestras muchas debilidades reconocidas hay una con...

LH: LasNoches De Sergio Carro Con Paula Villaverde y Noemí Valencia

Esta Noche volvemos a encender los altavoces del CAR. Seguimos en busca del AMOR. Prende la hoguera y quédate hasta el final. Hay SORPRESA. Pinta el...

02-12-2024 Celebramos le cumpleaños de Nelly Furtado, cantante y compositora canadiense

Hoy cumplen años 1940: Raimon, cantautor español en lengua valenciana.1960: Razzle (Nicholas Dingley) batería británico, de la banda Hanoi Rocks (f. 1984).1960: Rick Savage, bajista, cantante y compositor británico,...

«Hitler ha muerto» de Jean-Christophe Brisard y Lorenzo Pagliaro: realidad superando la ficción. Norma Editorial.

Lleva pasando desde que la humanidad camina por la Tierra, arrasando con todo lo que encuentra a su paso: ningún cuento de terror a...

RADIO DOMINATION EN LH MAGAZIN

Este jueves arranca con BLOODLUST y su death metal, seguidos por SINPEKADO y su death en castellano, MINOS nos acerca el sonido industrial y...

LH A Todo Ritmo: Driive revela su nuevo disco «Conspire»

En el episodio de hoy de LH A Todo Ritmo, te traemos una selección increíble de música y recuerdos inolvidables. Humo Sapiens, junto a...

RECprogrÁMATE «Frida Alanís: amor, pasión por lo que hace un exitoso emprendimiento»

En este episodio, conversamos con Frida Alanís, una joven empresaria de 21 años nacida en Nezahualcóyotl, Estado de México, que ha conquistado Madrid con...

Dos horas con el mejor rock en La Cabaña Del Tio Rock

Disponible para escucha y descarga a través de nuestro canal de iVoox de La cabaña del tio Rock LA CABAÑA DEL TIO ROCK (PROGRAMA...

Red de Autores: Cap.11. Cómo vivir de la música

Vivir bien de la música es casi tan difícil e inimaginable como viajar a Marte en Uber. Muchos lo intentaron, pero no han sido...

01-12-2024 Celebramos el cumpleaños de Gilbert O’Sullivan, cantante, compositor y pianista irlandés

Hoy cumplen años 1932: Matt Monro, cantante británico (f. 1985). 1933: Lou Rawls, cantante-compositor, productor y actor estadounidense (f. 2006). 1944: John Densmore, batería y compositor estadounidense, de la banda...