No hay nada como descolocar al lector haciendo a continuación de una fórmula de éxito algo tan completamente diferente que nadie se lo espere. Ese, en parte, es el caso de Magius, esotérico seudónimo tras el que se muestra Diego Corbalán, ganador del Premio Nacional del Cómic en 2021 con una novela gráfica que es imposible que pase de moda en este país: Primavera para Madrid (editada también por Autsaider Cómics), un manual en viñetas imprescindible sobre la corrupción, el chalaneo, el lenocinio y todas esas prácticas públicas pero mafiosas aplicadas a la gestión de lo público en España desde que nos decimos democracia. Magius siguió despuntando en 2022 con El método gemini (Autsaider Cómics, 2022), una muy colorida obra donde sus dibujos dan vida a la historia real de Mike Dioguardi, quien aprovechó la coincidencia de su apellido con el de un mafioso llamado John Dioguardi, para hacerse pasar por familiar suyo para entrar en el mundo de la mafia. ¿Y después qué? Pues casi hubiese resultado natural encontrarnos con un cómic denuncia destapando la inspiración en nuevas cloacas. Pero no. Apelando en realidad a sus orígenes en esto del cómic a lo que él prefiere a menudo llamar «códices», Magius retomó una vieja idea de sus inicios en el mundo de los fanzines autoeditados y ha decidido sorprendernos publicando un espléndido cómic en una edición aún más espectacular visualmente que sus dos obras anteriores con Autsaider. Y es que Black Metal salta a tus manos aún si ni siquiera sabías que el titulo es un estilo de música. Tapa dura imitando la textura y apariencia del cuero, con todas las páginas en riguroso negro, incluso los cortes de hoja, Black Metal, de antemano, es un espectáculo visual que no pasa desapercibido de ninguna forma.

Black Metal fue originalmente un fanzine autoeditado por Magius, cuyo primer número salió el 10 de septiembre de 2001. La idea fue siempre clara: con el estilo más detallista del que el autor es capaz en fondos y escenarios (sólo hay que ver las portadas de algunos de sus números), el fanzine ofrecía denso humor negro basado en la música Black Metal y, sobre todo, en sus oscuros y perturbados protagonistas. Narraba las famosas historias de los grupos de Black noruego de los noventa con todos los personajes más macabros del panorama musical retratado, pertenecientes a grupos como Mayhem, Burzum, Emperor, Darkthrone, Immortal… pero eso sí, todos ellos dibujados como niños de siete años que van cometiendo sus particulares travesuras a espaldas de sus padres, entendiendo por «travesuras» los famosos hechos reales mil y una veces relatados y conocidos por todo aficionado el Metal como como suicidios, asesinatos, quemas de las míticas iglesias de madera noruegas o la grabación de algunos de los discos que han marcado un estilo único.

En 2012 y a través de F.O.G. Comix, un sello de cómics completamente underground creado por Magius expresamente para autoeditarse, se embarcó en la tarea de recopila los mejores tebeos de ese primer fanzine en un cuidado tomo de 208 páginas, titulado en esta ocasión Black Metal Comix donde recuperó muchas de las páginas publicadas entre los años 2001-2007 en el fanzine homónimo. «Siempre tuve la idea de que cuando se cumplieran 10 años desde la aparición del zine -recordaba el autor cuando presentó esta compilación-, sacaría una especie de libro recopilatorio con la mayor parte del material publicado. También echaba de menos dibujar a todos esos personajes, así que pensé qué era lo que faltaba, y aunque había tratado ciertos aspectos del Inner Circle, el material que había era bastante pobre… Así que dibujé una historieta de 40 páginas, dedicadas completamente a las truculentas historias de la quema de iglesias, suicidios y asesinatos; y la he incluido en el libro».

Y como lo que nos construye a lo largo de los años es de las pocas cosas que nunca nos abandona, tentado por el más difícil todavía, Magius retomó el espíritu y lo mejor de aquellos inicios para darle una vuelta y rehacer y contarnos del tirón y bien, de una vez por todas, los orígenes de un estilo de música unido a un estilo de vida o lo que, en palabras del autor «cómo y por qué eclosiona -y sucede lo que sucede- la escena del Black Metal en la Noruega de los años 90″. Y es así como llegamos al Black Metal maravillosamente editado por Autsaider Cómics que es algo completamente distinto a las primeras historias y dibujos del autor sobre algo que, evidentemente, nunca ha dejado de apasionarle temática y musicalmente.

Sobre el Black Metal y el Inner Circle hay una numerosa e interesante bibliografía que pone los pelos como escarpias cuando descubrimos lo que los excesos de imaginación y libertad pueden ocasionar a este lado de la realidad. Pero personalmente, Black Metal es un cómic que, a los verdaderos apasionados del género, verdaderamente les tocará la fibra sensible como recuerdo reinventado de unos años verdaderamente locos y muy productivos a nivel creativo. Y es que, sin pretender ser abuelo Cebolleta y en un pasado en el que la música fue mi pasión principal, además de mi trabajo, viví parte del fenómeno y los rescoldos (nunca mejor dicho) de la resaca provocada por los excesos de bandas como Mayhem o Burzum fuera de su música. Leer Black Metal es darse cuenta de cómo Magius nos hace reír con su exagerada reinvención «basada en hechos reales, poco edificantes, evidentemente», a la vez que evidencia un profundo conocimiento de las muchísimas bandas de las que habla y que me han recordado el divertido contraste de muchas de ellas.

Y es que en su día realicé para España la promoción de bandas como Immortal o Darkthrone cuando trabajaba en una tristemente desaparecida distribuidora independiente. De hecho presencié y aún guardo fotos de Abath de Immortal maquillándose en su camerino antes de un concierto bromeando y sin dejar de hablar de la influencia de Kiss en su vida como músico. Quienes me conocen recordarán que en un festival metalero en Levante llegué a hacer de «niñera» durante tres días de Schmier, alma de los alemanes Destruction. E incluso estuve involucrado en la promoción de algunos discos de los actuales Darkthrone. Como botón de muestra, curiosamente durante la promoción de su disco de Circle The Wagons de 2010, Darkthrone evidenciaron un muy metalero sentido del humor aliándose con un versátil dibujante para publicar viñetas en una revista británica sobre la grabación de ese disco que, provenientes de ellos, son realmente memorables.

Ese pasado profesional musical me llevó, de hecho, a presenciar y presentar otro acercamiento completamente diferente al de Magius al mismo género musical retomado mediante las viñetas. Y es que en 2018, en un tomo de páginas tan negras como las de Black Metal, desembarcó la edición en castellano de un experimento llamado Belzebubs, un cómic convertido además en experiencia multimedia y en música, con una misteriosa banda detrás de la que se editó un gran disco de Black Metal sinfónico emulando a Gorillaz. En su modesta aportación como creador de su imagen, un modesto pero muy divertido autor finlandés llamado JP Ahonen vino a Madrid a presentar la versión en cómic a la que asistí como presentador del acto haciendo un refrito de la historia del Black Metal para la prensa en la presentación en una librería…

Por todo, Black Metal es un libro verdaderamente especial que además, a cualquiera que simplemente disfrute de los sonidos más extremos, podrá usar su disco favorito de Venom degustando una novela gráfica tan honesta como entretenida y muy divertida. Sólo imagina: Kristian es un niño noruego que odia su nombre y que, en pleno proceso de divorcio de sus padres, prefiere que le llamen Conde Grishnackh, señor del Mordor de Tolkien del que proviene semejante título. Creciendo en una Noruega en la que ya no hay vikingos que den miedo y donde a costumbres como el Blot Fest, donde, «poniéndose finos de hidromiel, los vikingos sacrificaban a los dioses 9 machos de diferentes especies, entre ellas la humana». Y es que el culto al aire libre ha sido sustituido por enormes iglesias medievales construidas enteramente en madera, el futuro Varg Vikernes no lo lleva demasiado bien. Por suerte, o desgracia, conoce y se hace amigo, muy amigo, de Øystein, otro niño conocido como Euronymous y que se dice líder de Mayhem, la reconocidísima banda infantil de Black Metal en esta Noruega alternativa, a través de la cual atrae a otros niños más pequeños hacia la secta satánica que se hace llama Inner Circle.

Magius explica la mayor y más evidente de las gracias de las viñetas de Black Metal de nuevo vigentes en esta magna aventura donde se cuentan sobre todo las historias de Mayhem y Burzum: «los cómics de Black Metal fueron pensados en su momento para ser leídos por gente que ya conocía esa escena y a esos grupos… Así que muchos de los lectores ya conocían las historias, aunque, en ocasiones, al tratar escenas muy locales, no habían oído hablar de ellas. Black Metal era una especie de El Jueves para muchos de ellos, pues trataba historias no sólo de los famosísimos músicos noruegos, sino también de escenas como la polaca (plagada de nazis y neopaganos), la francesa (Les Légions Noires), la alemana (más nazis, como el grupo Absurd), la hispanoamericana (con los chicanos de Morbosidad), la barcelonesa («Blackcelona», a estos les dediqué un número entero), y cualquier escena o grupo a nivel mundial que lo mereciera, por lo grotesco de su historia o sus pintas…”

Así que toma asiento y prepárate para presenciar las inocentes aventuras de un grupo de niños amantes del Metal en la Noruega de los años 90, incluyendo inducción al suicidio, profanación de cementerios, quema de iglesias… y, sí, más quema de iglesias de madera, hasta el punto de que Magius y Autsaider Cómics ofrecen con el libro Black Metal la posibilidad de recortar y prenderle fuego a tu propia réplica de una iglesia noruega para hacer de esta lectura una experiencia inmersiva completa en el folklore musical más auténtico.

Si recuperamos la compostura ante la risa y carcajada inevitable presenciando algunas de las situaciones en las que se ven envueltos Euronymous, el Conde Grishnackh y el resto de respetables y conocidos personajes basados en personas y seudónimos reales, hay que reconocer que Magius no sólo ha alcanzado esa espina que tenía clavada sobre la presencia gráfica de Black Metal, porque a la inquietante representación de todos los protagonistas como inocentes dibujos de trazos mínimos, a todos ellos los conduce a paisajes y pasajes donde las influencias artísticas son bastante más serias que el tono de sano humor negro que impregna toda la historia: y es que desde El grito de Edward Munch al Jardín de las delicias de El Bosco, pasando por las simbólicas y minimalistas ilustraciones de cuentos tradicionales noruegos de Theodor Kittelsen, Magius no deja de sorprendernos a cada capítulo mientras avanza la inevitable tragedia que sabemos espera a algunos de los componentes de la historia. Black Metal es una experiencia sensorial completa donde el humor vuelve a mostrarse como el más sano remedio para afrontar la realidad. Compruébalo por ti mismo en tu próxima visita a tu librería mas cercana.

SOBRE EL AUTOR

MAGIUS
Diego Corbalán (Murcia, 1981) es un ilustrador e historietista cuyo alias procede del monje miniaturista del siglo X. Ha sido un prolífico autor de cómics en el ámbito fanzinista, en el cual comenzó en 1998, en las páginas de DD/DT. Desde 2001 trabajó en su propio fanzine, Black Metal, en el que fue publicando historietas que diez años más tarde recopilaría en un tomo, editado por él mismo bajo el sello Fog Comix con el título Black Metal Comix. A partir de 2012 siguió trabajando en sus propios fanzines, siempre editados bajo el sello Fog Comix, firmando como Magius y como Yo, Perro, si los argumentos incorporaban animales humanizados: El Oráculo del Triángulo Hipster, Murcia I y II, Oink! The Comix, Clásicos Caninos, La Philosophie dans le Boudoir, Hammon, Todo por la vasca, El Mago, Ehieh, América, Witchcraft y Porno catalán. En 2014 se alió con Matías Pérez (alias Mätt) para fundar un festival de autoedición en Murcia, al cual llamaron Zorroclocos e Lobos, que con el tiempo se convirtió en uno de los más importantes del país. Desde 2015 trabaja profesionalmente en la historieta, desde que publicó con Entrecómics Cómics su libro Murcia, que partía de trabajos previamente publicados en sus fanzines y en el que mezcla la mafia con la religión en un contexto tradicional y urbano. En 2018 se rodó un corto inspirado en este cómic, titulado Murcia (dirigido por Juan Alberto Miñarro y el propio Magius). En abril de 2018 publicó su siguiente tebeo, ahora con Autsaider Cómics, El Método Gemini, otra historia de mafia pero ambientada en la Nueva York de la década de los años 70. En 2020 publicó Primavera para Madrid (Autsaider Cómics), obra ganadora del Premio Nacional del Cómic 2021.



